Empezó mal el día perdiendo guaguas y con reprimendas a otras amigas. Poco a poco fue mejorando decayendo al ponerse mal una gran amiga. Nos metimos en la multitud para poco a poco ir disfrutando del concierto. Bailes, risas y conocer gente nueva. Cóctel perfecto para un día inolvidable. Al comienzo la gente no estaba animada pero pasado un tiempo todo el mundo sacó su lado más fiestero, incluso yo, que soy la timidez en persona. Pasar calor como nunca antes, pero ver a personas con chaquetones da más calor todavía. Reencuentros con viejos amigos y recordar tiempos pasados. Cantar cada una de las canciones que sonaban y bailar sin importar los demás. A pesar del mal comienzo, un día perfecto.
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